sábado, 23 de febrero de 2013

Ojalá reencontremos II

Ojalá reencontremos las miradas
y los sueños entonces
-aquellos sueños primerizos y lejanos-
emerjan del olvido

Ojalá nuestras sonrisas
se entrelacen
y jueguen a ser una,
en sincera entrega

Ojalá, sin hablarnos,
podamos decirnos esas cosas
que aprietan en el pecho
y nuestros corazones encuentren así
su más perfecto latido

Ojalá
(palabra mágica que encierra emociones)
podamos ir juntos
más allá del tacto o de la vista
más allá de razones complicadas
más allá de sabores o temblores
más allá,
donde las almas vuelan
y la vida ríe
y la noche es día que ilumina
y el sol no es más
que la más linda estrella
de todas las noches,
                                  en el Universo.




Ojalá reencontremos nuestros ojos perdidos

Ojalá reencontremos nuestros ojos perdidos
y encontremos senderos donde robarnos besos
que se den con los ojos antes que con la boca
que se den con el alma, antes que con el cuerpo

Ojalá tú te acerques
Ojalá yo te espere
y en apenas un roce
de tu piel con la mía
avivemos el goce
de una llama encendida

Ojalá nos miremos como miran los niños
Ojalá la ternura sea nuestra compañía
y en un gesto, un abrazo
y en un abrazo, un gesto
y una caricia tuya
y una sonrisa mía

Ojalá vengas pronto
pues se me hace imposible
la distancia marcada
entre tu ser y el mío

Ojalá entre nosotros renazcan ilusiones
ojalá entre tú y yo hagamos un cometa
donde vuelen ligeros
los versos de un poeta
las manitas de  un niño
y todos los colores
que alegran el planeta.